Ciclistas colombianos y gestión de equipos, qué nos enseñan

31 de agosto, 2022

Renacer de las cenizas como el ave fénix es un concepto muy sencillo de plantear. Pero en la práctica, es muy difícil de lograr. Se necesita carácter y una férrea determinación para reponerse de las adversidades. Por eso, queremos revisar lo que en este aspecto nos enseñan los ciclistas colombianos y su gestión de equipos.

A continuación, conocerás historias de resiliencia de deportistas. Estas resultan motivadoras, al reflejar la persistencia que puede asumir un equipo para lograr sus metas. Esto es lo que cada día queremos lograr como empleadores y con nuestros trabajadores, para fortalecer la empresa.

Como en cualquier empresa, los equipos de ciclismo también aplican reclutamiento, gestión de tareas y mucho más.

El ejemplo de Rigoberto Urán en la gestión de equipos

Rigoberto Urán es un ciclista colombiano nacido en el municipio de Urrao, Antioquia. De condición humilde y muy bajos recursos económicos. Perdió a su padre a la edad de 14 años, lo que le obligó a asumir responsabilidades como proveedor de su madre y sus hermanos.

Sin embargo, nunca dejó de soñar con ser un gran ciclista, tal y como se lo había prometido a su padre. En los años 2004 y 2005 ganó La Vuelta al Porvenir en Colombia. Esto le permitió viajar a Europa, donde lo reclutó el equipo Team Tenax de Italia. Luego, en 2006, debutó como profesional.

Después, pasó por varios equipos en Europa y corrió en las grandes vueltas: Tour de Francia, Giro de Italia y Vuelta a España. Y ganó la medalla de plata Olímpica en la prueba de ruta de Londres 2012.

Además, tuvo dos segundos lugares en el Giro de Italia 2013 y 2014. A continuación, Rigo siguió compitiendo en la élite del ciclismo, pero sin grandes resultados. Muchos comentaristas plantearon que los resultados de 2015 y 2016 indicaban que Rigo debía retirarse de la élite.

Luego de dos temporadas sin grandes resultados, el equipo Cannondale-Garmin ve en Rigoberto un gran potencial, a pesar de su bajo desempeño en dos años.

Entonces, se inició un proceso de reestructuración en el equipo, para obtener mejores resultados internacionales.

El poder de la gestión de Recursos Humanos

Jonathan Vaughters era director del equipo Cannondale-Garmin en ese entonces, ahora Education First.

Él ideó, junto con sus colaboradores, un plan de trabajo completo y estructurado con el fin de alcanzar un alto rendimiento de los pedalistas de su equipo. Asociado a esto, el fichaje de nuevos talentos que proporcionasen capacidad y fortaleza al equipo.

Luego se inició la implementación de varias estrategias de entrenamiento y alimentación. Así como el diseño de un calendario ciclístico apropiado, para medir los kilometrajes y aumentar de manera progresiva el estado de forma de los ciclistas.

En consecuencia, en el año 2017 el equipo Cannondale-Garmin estaba listo para competir en el Tour de Francia. Los directores deportivos del equipo seleccionaron a sus ciclistas para competir en el Tour de Francia. Entre ellos, eligen a Rigoberto Urán como líder de la escuadra.

Gracias al gran trabajo realizado por el equipo, Urán presentó un estado de forma excepcional. Fue así como logró un segundo puesto en la general de la competencia, la más importante del mundo.

A raíz de los resultados de la gestión de equipo, este grupo de trabajo logró el patrocinio de la empresa Education First. Esto ha permitido una buena operación durante más de cinco años. Es decir, el trabajo constante y estratégico se ha visto recompensado.

La resiliencia en la gestión de Chaves y su equipo

Johan Esteban Chaves Rubio es un ciclista con mucha integridad y valentía. Inició su carrera ganando el prestigioso Tour de l’Avenir del año 2011, como aficionado. Luego, formó parte del equipo Colombia-Coldeportes.

En febrero del 2013, cuando corría el Trofeo de Laigueglia, sufrió una de las más graves y terribles caídas de su carrera deportiva, ya como profesional. El solo parte médico de la caída producía escalofríos.

“Trauma craneoencefálico, contusión pulmonar, fractura del oído, fractura en el pómulo, fractura del esfenoides derecho, en la base del cráneo, y fractura de la clavícula”. Un cuadro como para sentarse a llorar. Pero, a pesar de esto él perseveró.

A raíz del accidente, perdió toda la movilidad de un brazo, el cual tuvo que ser otra vez operado. Pero, la movilidad no volvió sino hasta siete meses después. Esto coincidió en que ese mismo mes recibió una oferta de trabajo por parte del equipo australiano Orica GreenEdge.

Desde la gestión de equipos de Orica Green Edge supieron captar el talento. Esto llenó de fortaleza y motivación a un Esteban Chaves que seguía perseverando y luchando por su recuperación física.

Comunicación interna

El equipo Orica GreenEdge de aquella época, bajo la dirección de Neil Stephens, conocía con claridad el estado de salud de Esteban. Sabían la situación médica del deportista. Pero vieron él potencial y sabían que apoyar su plan de carrera, traería frutos.

Además, el ciclista mostraba una férrea voluntad de sobreponerse a esa adversa situación.

Es así como inicia el trabajo de comunicación y motivación con el nuevo miembro del equipo. El idioma se interponía un poco en el logro de una comunicación asertiva. No obstante, Esteban lo aprendió, superando cualquier barrera de comunicación.

Esto logró un clima laboral extraordinario puesto que Chaves se ganó el cariño del equipo. Junto a ellos compitió en las grandes vueltas. De esta manera es como Esteban Chaves consigue consolidarse como uno de los talentos importantes del ciclismo.

Para resaltar sus logros: un segundo puesto en el Giro de Italia y un tercer puesto en la Vuelta a España. Además, ganador de un Giro de Emilia y un giro de Lombardía. Y varias etapas ganadas con su equipo.

El empleado soñado podría ser Nairo

Por su parte, Nairo Quintana era un joven campesino nacido en la ciudad de Tunja, en el departamento de Boyacá. Sus padres, de bajos recursos económicos, vivían en la vereda La Concepción del municipio de Cómbita.

Cuando Nairo tenía 15 años, con mucho esfuerzo, sus padres le compraron una bicicleta de hierro, para que fuera al colegio. La institución quedaba en un municipio cercano, llamado Arcabuco.

Para llegar, tenía que recorrer 21 kilómetros en pleno terreno de descenso, pero de ascenso al regreso. Además, Nairo amarraba su bicicleta a la de su hermana, para remolcarla y poder subir más rápido.

De este modo, Nairo se dio cuenta de que tenía aptitud para ser ciclista. Pese a su corta edad, podía mantenerse a rueda de los ciclistas que entrenaban por la zona. Apenas su padre se enteró, le compró una bicicleta mejor.

Productividad laboral

Debido a su alta eficiencia en tan poco tiempo, se inscribió en un club deportivo en Tunja. Allí le enseñaron a entrenar.

Luego pasó a varias escuadras colombianas, donde la gestión de equipos era buena. Pero, él tenía talento para más. Hasta que un director deportivo y cazatalentos español, Vicente Belda, le ofreció un contrato. Esto fue antes de que terminara su educación secundaria.

Sus aptitudes para el ciclismo fueron reconocidas de inmediato por aquellos que conocen de esos temas. Además, estaba rodeado de un excelente equipo de trabajo. Hasta que llegó al equipo Movistar, donde iba a potenciar todas sus cualidades como ciclista.

Gracias a su disciplina, a sus capacidades físicas y mentales… Al deseo de ser un gran deportista, Nairo Quintana logró vencer a oponentes internacionales. De hecho, ganó un Giro de Italia en 2014 y la Vuelta a España en 2016. Además, varios podios en el Tour de Francia.

Así se convirtió en uno de los más grandes ciclistas de Colombia y el mundo. Ha sido considerado el mejor escalador del planeta (especialista en ascender montado en la bicicleta).

Sabemos que estas historias inspiradoras invitan a tu equipo de trabajo a resurgir de la tempestad o de la crisis. A persistir para lograr objetivos. Por eso, para conocer más estrategias y acceder a herramientas para Recursos Humanos, no dejes de revisar Sesame HR.